Sin duda, el propietario de este inmueble, situado en los Miradores de San Lorenzo (esquina Cava), ha pensado que la campaña de promoción publicitaria de una conocida gran superficie de nacionalidad sueca bien puede aplicarse a todo. Por ello, no ha dudado en habilitar una tercera planta donde no hace mucho sólo había dos. Aunque un razonable optimismo debiera llevarnos a pensar que nuestro Ayuntamiento, que había prohibido esa tercera planta, rápidamente solucionará tan tramposa como ilegal solución, la verdad es que mucho nos tememos que una vez más triunfe la dejadez y la permisividad que desde hace años vienen siendo tan habituales en cuestiones de patrimonio y conservación del casco histórico.
8 comentarios:
viendo esta foto, casi pensaba que estaba haciendo un pasatiempo: busca las diferencias entre estas fotos...
La foto es la misma, pero retocada. En la de la izquierda le han quitado las ventanas, y ya está. No digo que no haya hecho chanchullo, pero es retocada.
Un saludo.
Es posible que esté retocada, pero es la realidad. Refuerza lo dicho por Muñoz Molina hace unos días en El País.
Es la misma foto, sin duda. Espero que tenga una explicación razonable pero mientras no tenga esa explicación, la verdad, la información de este blog del que me declaro o declaraba seguidor, va a quedar en entredicho. Saludos.
No es posible que esté retocada. Lo está. Fíjense en la sombra del tejado, en la sombra de la baranda, fíjense en la misma luz de las dos fotos. Para que concediesen estos parámetros tendrían que haberse hecho las dos fotos el mismo día, a la misma hora, a la misma distancia, a la misma altura y en el mismo ángulo, cosa que "asines".
Ignoro, pues la fotografía no la he realizado yo sino que me ha sido proporcionada, si estamos ante un retoque o no. Lo cierto, y eso si está constatado, es que el Ayuntamieto había prohibido los huecos de la parte superior, que sin ellos se había construido la casa y que lo que hoy vemos es producto de un proceso posterior. Es decir que los huecos se han abierto posteriormente y en contra de lo dispuesto. Y esto, como apunta uno de los comentarios, es la verdad.
Opino, como Francisco Javier y quien me precede en el lema, que la fotografía está retocada. Se aprecia con tanta claridad que es evidente que no se ha hecho nada para que parezca otra cosa. Sin embargo, me dicen que poco habría cambiado el resultado si se hubiese tomado la fotografía hace un mes y se contrastara con la realidad de este momento.
Ante la duda ¿será el Ayuntamiento capaz y tendrá voluntad de comparar lo que ahora vemos con el proyecto que en su día aprobara?
Publicar un comentario