Aun considerando que la calidad de las imágenes no es la mejor deseable (conseguir buenas fotos de Santa María se hace difícil desde hace 25 años), las dos fotografías previas, correspondientes a un detalle de la reja de la capilla de los Becerra, presentan dos momentos diferentes de su historia. La primera, realizada no mucho antes del cierre de la iglesia, nos muestra la magnífica obra del maestro Bartolomé ya incompleta, pero con alguna figura más de las que presenta en la actualidad, como puede verse en la segunda. Concretamente, me refiero a la imagen de Eva de la tercera escena, que por una parte aparece cortada por las rodillas -sin duda como consecuencia de algún desafuero de la guerra Civil- y, por otra, simplemente ha desaparecido. Claro, que si vemos las medidas de precaución que se tomaron cuando se decidió dejar caer a plomo las bóvedas para demostrar que la teoría de la gravitación universal también funcionaría en Úbeda (ver tercera fotografía), no extraña que se haya perdido una parte de la reja, lo que extraña es que aún siga en pie. Sin duda, Eva, viendo lo que se le venía desde el cielo y a pesar de su seccionadas piernas, huyó despavorida hacia un lugar "desconocido".
4 comentarios:
Reverenda, ¿conoce usted la forma o el enchufe necesario para arrancar una de esas figurillas de forja que hay en las rejas de Santa María y llevármela a mi casa? Como aquí cada uno ha arrumbado con lo que ha querido, me parece del género tonto ser yo el que se quede sin un recuerdo de la destrucción de Santa María.
Espero su respuesta, y agite el horno, que se le queman las madalenas.
Difícil está la cosa, hermano Manuel, y me temo que se va a tener que resignar a no tener nada de ese templo en su casa porque poco de él ha quedado. Recuerde ese dicho que corre por la ciudad en referencia al arquitecto que en ella "trabajó" y que dice algo así como "Isicio me deshicio". Y claro, de algo deshecho nada permanece. Con todo, le pido paciencia y confianza, ya que hasta este torno ha llegado el rumor que del nuevo artesonado (ese que costó casi un millón de euros) de vez en cuando se desprenden trozos, que en caída libre, llegan hasta el suelo. No le quepa la menor duda de que si uno de esos volátiles restos (preñado de arte)llegara a mis manos se lo remitiría con sumo gozo. No es lo mismo, pero algo es algo.
Quien tenga a su alcance la edición de 1958 de la Biografía de Úbeda, de Pasquau, que mire la página 49, cuente las figuras de la reja y atribuya una fecha a la fotografía de Baras.
Saludos a tod@s
Verdaderamente parece ser que la desmantelación de la reja se produjo con posterioridad a 1958 ya que la fotografía que aparece en la Biografía de Úbeda bien pudiera haberse hecho en ese mismo año. De ser así, y no hay razones para dudarlo, lo que se afirma en el comentario inicial sobre la desaparición de algunos elementos de la reja durante la guerra Civil no sería cierto y, por ello, pido perdón. No está bien faltar a la verdad -como ahora se dice- para una hermana tornera. Al hilo del justo correctivo que el anómino comentarista me ha dirigido, he dado en pensar que algunos de los daños que se atribuyeron a la guerra Civil los perpetraron quienes sobrevivieron a ella.
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